sábado, 2 de abril de 2022

 

Vulnerando razón de ser de entidades internacionales. 

                                                                                                                                   Dr. PhD Pascual Ramos Núñez

El poeta escribiendo versos en medio de las calamidades de destrucción, desolación y muerte producto de la guerra. La actividad bélica, justifica el poderío material de mentes cuadradas, que, desde su pedestal de monstruosidades, utilizan a soldados y civiles, como carnadas de sus insolencias dictatoriales criminales.

Es el absurdo de decisiones contadas en narraciones y descripciones, textualizando una macabra historia, de inocentes acribillados por misiles disparados desde el escondiste infernal, que alberga a los enemigos de la paz.

Las alertas de sirenas, las inquietantes detonaciones y el ritual sonido fúnebre de los campanarios; simbolizan lo tan distantes que se estás, de lograr la llamada: Civilización del Amor.

Se observa, que el pensar del dictador, se atrinchera en su escenario palaciego de lo que podría ser su propia destrucción. La tozudez de continuar imponiendo su idea no hace que reconozca las atrocidades, por lo que no presta atención a las recomendaciones de parar las hostilidades en los territorios invadidos.

La acción bélica criminar, violenta todos los principios patrios de soberanía nacional, por lo que los demás países deben de observarse en ese espejo; donde no se respetan los Derechos Humanos y donde se vulnera la razón de ser del Tribunal Supremo de La Haya y de otras entidades internacionales, creadas para cuidar y proteger la vida, en cualquier circunstancia.